Los bonos Globales suben 0,2% y acumulan una ganancia promedio de 74% en 2024. El indicador de JP Morgan tocó un piso de 823 puntos. Caen las acciones por el arrastre negativo de Wall Street
Los principales indicadores de las bolsas de Nueva York registraban un retorceso en un rango del 0,3% al 0,6% este martes, una tendencia que arrastraba a zona negativa a la cotización de las acciones argentinas. Por el lado de los bonos, los Globales en dólares se mantenían firmes respecto de la corriente externa, con una leve ganancia promedio de 0,2% que volvía a posicionar a los títulos soberanos en sus precios más altos desde que salieron al mercado.
A las 13:40 horas, el precio promedio de los Globales -en dólares con ley extranjera- alcanzaba los USD 64,66, un máximo desde su salida a cotización en septiembre de 2020. Los precios más altos se observan en los títulos de menor duration, el Global 2029 (GD29) y Global 2030 (GD30), a USD 75,81 y USD 71,35, respectivamente.
En el mismo sentido, el GD29 y el GD30 son los instrumentos de este segmento que más vienen subiendo en 2024, un 89,7% y 77,3%, respectivamente. En promedio los Globales del canje anotan una ganancia en dólares de 73,7% en 2024, que ya le compite palmo a palmo al avance de las acciones, con un S&P Merval que asciende 78% medido por la paridad del “contado con liquidación”.
En este aspecto, el riesgo país de JP Morgan, que mide el diferencia de tasa de retorno de los bonos del Tesoro de los EEUU con sus pares emergentes, tocó un mínimo intradiario de 823 puntos básicos para Argentina, un nivel no visto desde el 1 de agosto de 2019 (818 puntos). Por la tarde regresó a los 850 enteros.
Sobre los bonos argentinos incide una mejor percepción inversora, en base a las perspectivas sobre la economía, pues se prevé un sendero de crecimiento, la evidente retracción inflacionaria, el superávit fiscal y consolidación de un esquema cambiario cuya brecha se viene reduciendo “de arriba ara abajo”, es decir con la convergencia de precios hacia el tipo de cambio oficial.
Los analistas de Portfolio Personal Inversiones enfatizaron que “la dinámica continúa. Argentina está jugando su propio partido en cuanto a la evolución del precio de su deuda. Todos los catalizadores que acompañaron el rally de los últimos dos meses continúan firmes: el BCRA siguió acumulando reservas, el blanqueo continúa trayendo flujo neto positivo de depósitos en dólares y la imagen del Presidente dejó de mostrar signos de deterioro en las encuestas. Además, el triunfo de Donald Trump afianzó la expectativa respecto de lo que puede ser un nuevo acuerdo con el FMI que habilite un desembolso de fondos frescos”.
“La llegada de fondos frescos junto a un exitoso blanqueo de capitales ha incentivado la compra de activos domésticos, los que transitan precios récord”, indicó Reuters.
“Sobre la victoria electoral de Trump debemos decir que los resultados lucen contundentes a punto tal que el escenario base hoy es que el partido Republicano tenga mayoría en ambas cámaras del congreso. De esta manera, llevar adelante su agenda económica podría resultarle más fácil. Dicho plan gira en torno a, principalmente, cuatro aspectos: reducción de impuestos, aumento de aranceles a las importaciones, endurecimiento de las políticas inmigratorias y reducción de las regulaciones. El efecto macroeconómico esperado por el consenso del mercado sería el de una actividad económica acelerando su crecimiento, compañías mejorando sus márgenes y un mayor deterioro en las cuentas fiscales”, detalló el Equipo de inversiones de Argentina de Schroders.
Frente a una parcial oxigenación del mercado, la Bolsa de Buenos Aires mostraba a su índice líder S&P Merval con caída de 0,9%, en 1.970.000 puntos, luego de una apertura alcista y aún en torno a su récord nominal.
“Veremos si la inflación de octubre se ubica por debajo de 3% y estimula aún más la demanda de bonos en pesos a tasa fija con un dólar planchado. Otro escenario que vemos menos probable es que una toma de ganancias a nivel externo o el fin del blanqueo estimulen la dolarización de carteras y la suba del contado”, afirmó Andrés Vernengo, analista de Capital Markets Argentina.
El Gobierno argentino designó el martes a Alejando Oxenford como nuevo embajador ante Estados Unidos en reemplazo de Gerardo Werthein, quien a fines de octubre fue designado canciller. Este nombramiento es relevante para el mercado ya que el reciente triunfo electoral de Donald Trump posiciona a Milei de buena manera ante la nueva realidad política estadounidense dado la buena relación entre ambos mandatarios.
“En el corto plazo, el impacto de la victoria con Trump es positiva para Argentina ya que podría mediar favorablemente en la relación con el FMI, en el marco de un nuevo acuerdo”, señaló Invecq Consultora Económica.
Mientras tanto, la Cámara de Diputados buscaba quórum ante un intento de la oposición de tratar una modificación al uso de Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), muy usado por la gestión de Milei dada su minoría legislativa.